Aunque el problema de la vialidad que se vive en el municipio de Camerino Z Mendoza es grave, en buena parte obedece a que los conductores no respetan el reglamento, aseveró el regidor con la comisión de Tránsito y Vialidad, Héctor Rodríguez Cortés.

Refirió que al inicio de esta administración convocó a reuniones a comunidades escolares, lamentablemente, de veinte escuelas sólo acudieron cinco o seis, y sin la participación de la población no se pueden solucionar los problemas.  Comentó que uno de los factores que ha incidido en la problemática que se vive es el crecimiento del comercio en forma desorganizada, pues desde que se cerró la fábrica de CIVSA mucha gente se dedicó a la venta de artículos diversos.

Indicó que hoy son calles enteras las que ocupan esos vendedores, pero si el municipio no tiene forma de ofrecerles fuentes de empleo o un lugar para reubicarlos, tampoco puede ser represivo y desalojarlos.

Agregó que a ello se suma el que los automovilistas no respetan el reglamento vial, y parece inconcebible que lleguen a Orizaba y ahí sí se ponen cinturón de seguridad, no hablan por teléfono y no se estacionan en lugares prohibidos o incurren en otras faltas.

Atribuyó lo anterior a que en Orizaba hay cero tolerancia en este aspecto, y si algo afecta a la población es pagar multas porque a veces no se tiene ni el dinero, pero en Mendoza, que es su casa, hacen lo que quieren.

Señaló que son entre 3 mil y 4 mil automoviles los que circulan diariamente, por lo que los días de plaza, que son martes, sábado y domingo, entre la instalación de comerciantes y el nulo respeto al reglamento, todo se vuelve caótico.

Mencionó que esta administración dejó gestionados y aprobados proyectos como puentes para solucionar esta parte, pero nunca se concretaron ante la falta de dinero de la Federación y el estado, por lo que se espera que queden como base para que los pueda poner en marcha la próxima administración.


CC