Internacional

Votan por la no reelección; consulta popular en Ecuador

05 de Febrero de 2018 08:59 /

El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, dijo ayer que las respuestas “sí” a las siete preguntas de la consulta popular impulsada por él ganaron en el plebiscito celebrado ayer, al que fueron convocados poco más de 13 millones de ecuatorianos de los cuales sufragaron 74.8%.

Afirmó que ese triunfo es fruto de los diálogos que abrió desde hace ocho meses, cuando dio inicio a su gobierno, y adelantó que “no volverán ya los viejos políticos”.

"Votar es también dialogar; les agradezco por su participación cívica”, dijo el mandatario en una primera evaluación rodeado de su gabinete y de autoridades nacionales. “La victoria del sí abre caminos, es hora de volver a abrazarnos”, señaló en un llamado a la reconciliación de los ecuatorianos.

"Hoy tenemos la respuesta y la propuesta, ahora todos estamos obligados a ejecutar este mandato sin demora, estamos obligados a ser consecuentes con los resultados obtenidos”, señaló el Presidente cuando había sido escrutado el 25 por ciento de las actas.

La votación se produjo en medio del actual enfrentamiento entre el presidente Moreno y su exaliado y actual adversario político, el ex presidente Rafael Correa, quien considera el plebiscito inconstitucional.

De acuerdo con un conteo rápido realizado por el Consejo Nacional Electoral, un 67,3% de los ciudadanos votaron para rechazar dicha enmienda. Tal mecanismo tiene 99% de confiabilidad, señaló el CNE.

De confirmarse esto, el expresidente Rafael Correa (2007-2017) no podrá volver a postularse para ese cargo. Los mandatarios del país podrán gobernar en dos ocasiones.

"No volverán ya los viejos políticos, tienen la obligación de renovarse”, dijo Moreno, interrumpido por aplausos y sin mencionar el nombre de ningún político en particular.

Además, de acuerdo con los primeros resultados, el “sí” triunfa en cada una de las restantes seis preguntas de la consulta referidas a temas como la inhabilitación de políticos corruptos, la no prescripción de delitos sexuales contra menores, la prohibición de la minería metálica, la derogación de la Ley de Plusvalía (un instrumento legal que genera un impuesto para la compra-venta de inmuebles, en algunos casos de hasta el 75 por ciento de su valor), la ampliación de zonas intangibles y la conformación por elección popular del organismo que designa a las autoridades de control.

Moreno indicó que la Asamblea Nacional “pondrá en marcha los mecanismos para las reformas pertinentes”, tanto de la Constitución como de las leyes, tras los resultados de la consulta popular.

Asimismo, se mostró agradecido con los ciudadanos por apoyar los temas de la consulta. “Gracias por incentivar a nuestros jóvenes a participar en política, los partidos tienen la obligación de renovarse; gracias por cuidar a nuestros niños toda una vida, gracias por cuidar el (Parque Nacional) Yasuní, gracias por darme su opinión, ya que necesito esa opinión para poder gobernar”.

El Parque Nacional Yasuní, en la cuenca amazónica, es una de las zonas con mayor biodiversidad en el mundo. Correa propuso no explotar sus ricos yacimientos petrolíferos pero obtener a cambio una compensación internacional. Su iniciativa no prosperó y dio paso a un programa de explotación petrolera autorizado por la Asamblea Nacional que permitió rastrear pozos en más de mil hectáreas, que ahora el gobierno busca reducir a 300.

La convocatoria es interpretada por analistas políticos como un barómetro del apoyo con que cuenta Moreno entre la población, teniendo en cuenta que Correa ha sido el único que no ha apoyado el plebiscito, a menos de un año de que llegara al poder.

LA POLÉMICA DE LA CONSULTA

La consulta generó una gran polémica porque propone cambios en algunos puntos que fueron clave durante el gobierno de Rafael Correa, como la reelección indefinida, aprobada mediante Enmienda por la Asamblea Nacional el 3 de diciembre de 2015.

Al buscar dejar sin efecto estas políticas, Moreno transparentó su objetivo de marcar distancia con su antecesor y hacer un gobierno con su estilo.

Correa, por su parte, cuestionó el envío directo de la consulta a la Comisión Nacional Electoral sin esperar un pronunciamiento de la Corte Constitucional, por lo que la considera ilegal. Además, cree que prohibir la reelección indefinida de presidentes es un retroceso de derechos.

El exmandatario llegó a denunciar la situación ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, organismo al que en su momento cuestionó duramente e incluso incumplió algunas de sus resoluciones relativas a la libertad de expresión.

La polémica afectó la unidad del Movimiento Alianza País (AP), gracias al cual Correa y Moreno llegaron a la Presidencia, que quedó dividido en dos. Esta ruptura quedó patente también en la Asamblea Nacional.

Las siete preguntas de este referéndum consultaron a los ciudadanos sobre la eliminación de la reelección indefinida, la inhabilitación de políticos corruptos, la no prescripción de delitos sexuales contra menores, la prohibición de la minería metálica, la derogación de la Ley de Plusvalía, la ampliación de zonas intangibles y la conformación por elección popular del organismo que designa a las autoridades de control.

PIDE AUTORIZACIÓN PARA NO IR A VOTAR

El expresidente de Ecuador Rafael Correa se presentó ayer ante una Junta Electoral en Guayaquil para obtener un certificado que justificara su ausencia en Bruselas, donde debía votar la consulta popular impulsada por el mandatario Lenín Moreno.

El sufragio es de carácter obligatorio en Ecuador y, por ello, Correa, que se encuentra en la nación andina desde hace casi un mes, no pudo ejercerlo al estar inscrito en la capital belga, donde tiene fijada su residencia desde que se trasladara a vivir allí junto a su familia en julio pasado.

"Se ha presentado (en la Junta Electoral) a horas de la mañana porque es lo que le corresponde”, indicó Luisa González, allegada al exmandatario durante la campaña que ha impulsado por el no, y que lo ha llevado a recorrer diferentes municipios del país.

González, funcionaria pública que ha pedido vacaciones durante ese periodo para apoyar a Correa como voluntaria, precisó que el expresidente se encontraba ayer en la ciudad de Guayaquil “en una actividad personal y familiar”.

Correa, precisó, aprovechó este viaje para visitar a su madre y se mantendrá a la expectativa de conocer los resultados de la votación en esa ciudad, que es la de mayor población del país.

Durante su campaña ha insistido en que el referendo y consulta popular son inconstitucionales en la forma en que se convocaron, así como algunas de las preguntas que contiene, entre las cuales figura la de derogar una enmienda constitucional que permite la reelección indefinida de autoridades.

Sin pronunciarse sobre la consulta, ayer sólo envió un mensaje por una red social para advertir que el voto en Europa ha favorecido de forma mayoritaria el no.

En las urnas se responde a siete cuestiones vinculadas con la lucha contra la corrupción, la anulación de la reelección indefinida, la posible derogación del Consejo de Participación Ciudadana, la lucha contra la pederastia y la imposición de restricciones a la minería descontrolada.

Éstas cinco forman parte del paquete del referendo, e implican de hecho una reforma constitucional.


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