Deportes

La nueva pasión de Phelps: dejar enseñanzas

12 de Diciembre de 2017 08:26 /

En más de una ocasión Michael Phelps pensó qué sería de su vida cuando dejara de nadar... No había entonces mucho tiempo para dejar de entrenar o administrar el descanso, pero siempre tuvo claro que sería más compleja que ir en busca de medallas.

Ahora que lo vive, el nadador estadunidense, poseedor de 28 preseas olímpicas, siempre deja entre los asistentes a sus conferencias el mensaje de tener grandes sueños, ser disciplinados y entrenar duro; pero... ¿Cuáles son los nuevos sueños de Phelps?

"Mi agenda está muy llena, todo el tiempo me estoy moviendo de un lugar a otro. Estoy viajando, pero creo que soy muy afortunado porque la mayor parte de mi vida estoy haciendo cosas que me gustan, que me apasionan. La oportunidad ahora es enseñarle a la gente”, dice Phelps en su visita a México durante una charla con Excélsior.

"Quiero enseñarle a la gente la importancia de tener una mentalidad fuerte, firme. Si mucha gente lo entiende me sentiré bien. Es parte de la vida tener muchas pasiones, pero deben de tener claro qué buscan, mi meta, por ejemplo, era ganar medallas de oro, era lo más importante de la vida y lo disfrutaba; ahora quiero que sepan que si ellos logran disfrutarlo lo van a conseguir”, explica.

Phelps es de palabra fácil, entiende que la normalidad nunca va a ser parte de su camino y que su objeto de vida ahora radica en sentirse satisfecho por lo que hace.

Por esa razón decidió dejar el retiro en 2014. No había quedado contento al retirarse tras Londres 2012. Entonces fue a Río de Janeiro 2016; dejó su marca en 28 medallas olímpicas (23 de oro), y se sintió feliz para dar paso al retiro definitivo.

Ahora es padre, posee una propiedad en Los Cabos, Baja California Sur, que disfruta mucho, y tiene pocas dudas sobre cómo llevar su nueva faceta lejos de la alta competencia deportiva.

"La natación era muy absorbente, pero sencilla de practicarla; el reto ahora es tener diferentes metas”, dice Phelps.

Otro momento en que se queda pensando es cuando lo cuestionan qué sería si no se hubiera dedicado a la natación. Dice que, seguramente, jugaría golf, y sería un aficionado empedernido de los deportes.

De lo que no queda duda es que, así como Michael Jordan lo inspiró, ahora entiende que entre sus obligaciones está dejar un legado alrededor de sus logros.

"Tengo que continuar creciendo mi marca, seguir aumentando mi legado como nadador”, afirma. “Es igual de importante ganar una medalla que el trabajo de mi fundación, donde el objetivo es que la gente pueda tener clara la importancia de nadar con seguridad; eso va a cambiarte la vida”.

Phelps dice que de la competencia extraña representar a su país, le parece que serán extraños unos Juegos Olímpicos, por primera vez en dos décadas, sin él en la alberca y sin el jamaiquino Usain Bolt en la pista de atletismo.

"Estar en el podio, escuchar tu himno es la experiencia más maravillosa que puedes tener, las nuevas generaciones deben crear su propia historia a partir de la gran virtud del movimiento olímpico: la posibilidad de medirte con los mejores del mundo”.

Recuento de logros

Su primera participación en Olímpicos fue a los 15 años, en Sydney 2000, donde su mejor resultado fue un quinto sitio en los 200m mariposa.

Debutó en Mundiales en 2001, donde ganó sus primeras preseas; en Atenas 2004 comenzó su andar dorado en Juegos Olímpicos.

El momento histórico de Michael Phelps fueron los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, cuando ganó ocho medallas de oro para superar la marca de siete que había impuesto Mark Spitz, en Múnich 1972.

Obtuvo 28 medallas olímpicas (23 oros) para ser el deportista más laureado en la historia de las justas.

Posee los récords de 100 y 200 mariposa, así como el 400 combinado individual.


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